TECNOLOGÍAS DIGITALES AL SERVICIO DE LA PSICOLOGÍA

  En las últimas décadas la tecnología ha proporcionado una serie de estrategias y herramientas para el desarrollo de la sociedad en diferentes ámbitos en los que el ser humano se desarrolla en su cotidianidad, entre estos el ámbito de la comunicación en el impacto ha sido enorme, dado que aún aumentado las redes de comunicación y han hecho posible que las personas se puedan mantenerse comunicados por internet desde los lugares más recónditos del paneta. Sin embargo un aspecto que ha sorprendido a gran parte de la población es el uso de las herramientas y estrategias tecnológicas en los ámbitos que implican o abarcan salud integral de los seres humanos, ya se está física y/o psicológica. En cuanto a la psicología, esta se ha visto en la necesidad de adaptar sus intervenciones al campo tecnológico, ofertando un mejor acceso a los usuarios que necesitan  de los  servicios de la misma, velando y respetando siempre por la integridad de los pacientes. Los profesionales de la salud mental

  La tecnología tras la pandemia ha generado un gran impacto en todos los niveles de la sociedad afectando diferentes ámbitos en los que el ser humano se desenvuelve en su cotidianidad, como lo son la educación, los sectores de producción, la comunicación, sin embargo un aspecto que ha sorprendido a gran parte de la población es el uso de la tecnología en los ámbitos de la salud integral, ya se está física y/o psicológica. En cuanto a la psicología, esta se ha visto en la necesidad de adaptar sus intervenciones al campo tecnológico, ofertando un mejor acceso a los usuarios que necesitan   de los   servicios de la misma, velando y respetando siempre por la integridad de los pacientes. Los profesionales de la salud mental han adaptado a la tecnología como una herramienta para desarrollar activadas de investigación, promoción, prevención, intervención en la salud mental, como la creación de talleres virtuales para la prevención del suicidio en adolescentes o talleres de capacitación par

Es interesarse como el modo en que la psicología se despliega y desdobla más allá de sus propias demarcaciones y prácticas profesionales, supone estar al tanto sobre las “formas” en que estas actuaciones psicologizan los recursos (de subjetividad) disponibles para actuar y pensar sobre nosotros mismos y los otros en distintos espacios, el ciberespacio inclusive. Reflexionar sobre las incursiones de la psicología en los nuevos espacios de la cibercultura supone, por tanto, considerar el modo en que las distintas formas de subjetividad que habitan el ciberespacio plantean o no un reto a las densas redes de tecnologías virtuales y materiales y prácticas que tienen que ver con la ‘mente’ y ‘el comportamiento’ y que constituyen el trabajo académico y profesional psicológico. El impacto de las nuevas tecnologías de la comunicación coincide con el progresivo aislamiento de las personas y el paulatino deterioro del tejido social. Por lo tanto, abordar el creciente interés de la psicología po