ENSAYO: LA SOCIOGÉNESIS DE LA PSICOLOGÍA

Es interesarse como el modo en que la psicología se despliega y desdobla más allá de sus propias demarcaciones y prácticas profesionales, supone estar al tanto sobre las “formas” en que estas actuaciones psicologizan los recursos (de subjetividad) disponibles para actuar y pensar sobre nosotros mismos y los otros en distintos espacios, el ciberespacio inclusive. Reflexionar sobre las incursiones de la psicología en los nuevos espacios de la cibercultura supone, por tanto, considerar el modo en que las distintas formas de subjetividad que habitan el ciberespacio plantean o no un reto a las densas redes de tecnologías virtuales y materiales y prácticas que tienen que ver con la ‘mente’ y ‘el comportamiento’ y que constituyen el trabajo académico y profesional

psicológico. El impacto de las nuevas tecnologías de la comunicación coincide con el progresivo aislamiento de las personas y el paulatino deterioro del tejido social. Por lo tanto, abordar el creciente interés de la psicología por las nuevas tecnologías de la comunicación, también supone reflexionar sobre el modo en que el internet se oferta como uno de los principales medios de socialización, es decir un medio indispensable para la comunicación del ser humano, convirtiéndolo al ser humano en generador de interacciones interpersonales virtuales y compensando de esta manera el desarraigo, al igual que la soledad creciente.

La actividad de comparar la mente con distintos mecanismos ha sido una constante a lo largo de la historia de Occidente, serían primero los filósofos de la Grecia clásica, y luego los empiristas, que compararían a los seres humanos con tablas rasas, una analogía que, a su vez, estaba inspirada en las tablillas mesopotámicas de cera que permitían escribir, almacenar y transmitir información. Es decir que las analogías humano/máquina hacen incapié a  que las mismas han ayudado a representar a los individuos y los colectivos con arreglo de los distintos sistemas políticos y económicos en boga, al igual que a partir de las distintas tecnologías y dispositivos existentes , aunque la metáfora mecánica es un indicador del periodo moderno, las analogías entre lo humano y la máquina han constituido una práctica habitual entre los psicólogos, como hemos empezado a mostrar con la metáfora de la tabla rasa, en otras palabras no se preocupa de las consecuencias de un acto en el aquí y el ahora, sino de todos los posibles comportamientos que se pueden producir. Es así como nace el creciente interés que la psicología hacia la cibercultura y el ciberespacio, dado que no se limita a los dominios de la psicología hegemónica. Sin embargo a pesar de sus reticencias iniciales por conferir a la tecnología el debido estatus de régimen conceptual, la psicología crítica también ha mostrado durante los últimos años un cierto interés por las relaciones tecnoculturales, tal como hemos visto, sus múltiples aplicaciones y distintos fragmentos de ciencia ficción,  nos ponen al tanto sobre cómo las transformaciones que se están llevando a cabo incluso dentro de la propia disciplina son permeables al ámbito de la cultura popular y viceversa; es decir, el modo en que la tecnociencia se apropia de los conocimientos que forman parte de los distintos imaginarios sociales, la fuerza de la tercera cultura no reside en la palabrería y discusiones entre las clases intelectuales dirigentes, sino en el hecho de que los debates se centran sobre fenómenos que afectan o afectarán a todo el mundo sobre el planeta . Los componentes de la tercera cultura no son personas o científicos con meros conocimientos expertos, sino personas que moldearán el pensamiento y la vida de sus coetáneos. Desde estas ópticas el cuerpo humano se concibe como el obstáculo último que les impide la fusión completa con las ondas y redes informáticas, o la fusión última con las tecnologías y espacios de la información.

A manera de cierre,  es necesario destacar que debido a la revolución  tecnológica que se ha presentado en estas últimas décadas, en especial en estos dos últimos años de pandemia en donde la tecnología se ha vuelvo un recurso indispensable para el desarrollo de la sociedad y cultura, la psicología se ha visto en la necesidad de acoplarse y adaptarse a estas realidades para poder comprender los comportamientos de los seres humanos y sus contextos en estos ciberespacios que abarcan gran parte de la interacción humana, todo esto con la finalidad de apropiarse y ser una parte activa en la tercera cultura.  

Referencias

Gordodo, A. (s/f). Nuevas tecnologías de la información y conocimiento psicológico: sociogénesis de la ciberpsicología. http://openaccess.uoc.edu/webapps/o2/bitstream/10609/78513/5/Sociog%C3%A9nesis%20de%20la%20psicolog%C3%ADa%20cient%C3%ADfica_M%C3%B3dulo%204_Nuevas%20tecnolog%C3%ADas%20de%20la%20informaci%C3%B3n%20y%20conocimiento%20psicol%C3%B3gico.pdf